No soy solo «la fotógrafa»; me sumerjo en vuestro relato, convirtiéndome en un testigo silencioso pero apasionado de los momentos que hacen palpitar vuestros corazones. Es más que una sesión de fotos, es una colaboración, una narrativa visual que se construye juntos, un capítulo de vuestra historia de amor que capturo con el arte y la dedicación que define a Bodas Love.

Y mientras estaba allí, entre vosotros, Carla y Abraham, reviví momentos de mi propia historia. Como fotógrafa, me sentí especialmente emocionada al reconocer entre vuestros invitados a varias personas a quienes había fotografiado años atrás. Algunos eran antiguos clientes, otros incluso eran parejas cuyas bodas había tenido el honor de documentar. Sentí una profunda conexión con vosotros, como si estuviera capturando no solo vuestro amor, sino también un pedazo de mi propia trayectoria, uniendo pasados y presentes en un instante inolvidable